Decoración blanca moderna en interiores de diseño
El color blanco es la tendencia de los últimos años en la decoración de interiores. El blanco está entre las tonalidades más usadas tanto en el diseño de interior de viviendas como en espacios comerciales, y ni siquiera nos sorprende, ya que la decoración blanca da puntos a cualquier espacio y además se adapta a muchos estilos de interiorismo usándose como color del fondo.
En el mundo de la decoración, el blanco es conocido por incluir todas la tendencias del diseño moderno. Cuando vemos las imágenes del diseño moderno, notamos que ha llegado actualmente a convertirse en una parte más popular de la decoración actual.
La verdad es que no se usa el blanco puro en interiorismo, sino sus distintas tonalidades para que no sea tan estéril y duro, y formar contrastes más hogareños y suaves al mismo tiempo, reflejando la sensación de amplitud y cierta elegancia. Los espacios blancos modernos están destinados a reflejar el descanso, generar una sensación de mayor amplitud, sencillez, pureza y tranquilidad. El blanco es el color de la paz, la delicadeza y el romanticismo.
Las tonalidades blancas hacen más grandes los espacios y aportan luminosidad. Para aquellos lugares con poca luminosidad, el blanco será la solución más eficaz, aportando energía y brillo al interior oscuro o pequeño.
Este tipo de decoración exige tomar ciertas precauciones, pues el blanco también puede representar el vacío, la angustia y la ausencia. Del mismo modo, mal utilizados, los tonos blanco roto y crema pueden parecer un blanco sucio. El blanco puro, por su parte, puede dar a la vivienda un ambiente de hospital o un espacio sin personalidad. Por eso, optando por el blanco, hay que saber jugar con las tonalidades, las texturas y con los materiales.
A pesar de los inconvenientes ya mencionados, las tonalidades blancas proporcionan enormes beneficios:
- Mejoran la sensación de amplitud de los espacios.
- Funcionan como base neutra en el hogar.
- Se adaptan a todo tipo de estilos (moderno, rústico, clásico, minimalista, marino…).
- Se combinan con cualquier otro color y son perfectas para crear diferentes efectos.
- Son tonalidades frías, y eso viene muy bien para decorar interiores con clima cálido.
- Son aptas para los espacios pequeños.
- Reflejan totalmente toda la luz que reciben, aumentando así la iluminación de los espacios.
La elección creativa de materiales puede crear un interior muy especial con efectos visuales y texturas interesantes. La clave está en saber combinar los materiales con las texturas adecuadas para crear un contraste de colores, texturas y tamaños de los objetos, aumentando la profundidad visual al interior. Es muy importante tener en cuenta que las texturas aportan valor añadido a los proyectos.
La base de interior blanca nos da una tremenda sensación de limpieza y, por lo tanto, necesita materiales naturales cálidos como piedra, madera, pizarra, cerámica y porcelana. Los materiales en los suelos, como las baldosas de terracota o la madera, son la mejor opción para romper con su frialdad. Las combinaciones con materiales naturales destacan un concepto ecológico y actual, creando un diseño moderno y simple. Por otro lado, las tonalidades blancas se combinan también con el suelo de color crema claro o gris. El vidrio y otros materiales innovadores para interiores son un buen partido para los ambientes blancos modernos, ya que reflejan elegancia y frescura. El interior blanco moderno requiere el uso de materiales como cristal, mármol y encimeras de materiales nuevos, ya que se combinan muy bien con el metal clásico y el acero inoxidable, los muebles blancos o de colores neutros lacados.
Los interiores blancos más clásicos optan por las combinaciones de los muebles de madera tradicionales y clásicos en el juego con capitoné, y los metales cálidos también pueden ayudar a aportar calidez. Los materiales dorados, como latón, bronce, cobre y oro, resultan también acogedores. Las paredes blancas están acordes con textiles como lino, algodón, lana… Lo cierto es que se puede lograr mucho simplemente jugando con texturas y materiales: сabeceros tapizados, cortinas, tapizado de los sofás y las sillas, y otros textiles.
El blanco en el interior se armoniza casi con todos los colores y permite crear combinaciones de colores que a la vez sean funcionales y estéticas, y se presta a muchos estilos diferentes. Dependiendo de los tonos, los muebles y los materiales que utilicemos, crearemos efectos totalmente contrarios.Con la idea de crear un interior moderno, una opción maravillosa será la combinación del gris, el negro o los colores crema. Si combinamos el blanco con su contrario, el negro, obtendremos una sensación ligeramente masculina. El blanco se combina bastante bien con otros tonos neutros como el marrón, el berenjena, el caqui, el verde, el azul…
A la hora de crear un interior nórdico, el blanco es el color dominante en el juego con el gris, el negro, el arena, el rosa cuarzo, el amarillo, el azul y el verde. Las combinaciones del marrón y el blanco crean espacios contemporáneos. Jugando con la gama de blancos y neutros, logramos diseñar un ambiente con un toque natural y ecológico; una combinación perfecta es la decoración en blanco y arena o blanco y gris pálido. Y en cambio, si lo asociamos a colores llamativos, tendremos espacios modernos y actuales. La fórmula de últimas tendencias en diseño de interior es un 90 % blanco y un 10 % de color vivo; eso nos da el aspecto fresco y juvenil.
La elegancia entra en tu hogar con el blanco. La base blanca del interior es una opción perfecta para los amantes de la decoración particular. Un elegante interior blanco necesita siempre los textiles para crear ambientes sofisticados y serenos, y sobre todo telas que no se manchen, que no se rayen y dispongan de las últimas tecnologías para sobrevivir a niños y mascotas. Parece que la tapicería blanca es más difícil de mantener limpia y que la suciedad se nota rápidamente, pero las tapicerías modernas tienen la protección antimanchas. Hoy en día existen telas que permiten la limpieza de las manchas simplemente utilizando un poco de agua. Además, la base blanca del espacio nos permite incorporar una amplia gama de colores e incluso las geometrías.
Los tejidos para el tapizado de sofás, sillones, sillas y cabeceros de cama se convierten en piezas imprescindibles para los espacios blancos, para darles un toque más tradicional o más moderno, pero de todos modos atraen la calidez al hogar y añaden a las superficies un tacto dulce y agradable. Los tonos y las texturas son capaces de recordarnos la cálida arena de las playas o campos de lavanda en la campiña francesa. La decoración blanca permite que puedas crear ambientes con piezas de aspecto interesante según tus gustos.